Es sábado por la noche y necesitas almacenar tus lentejas, pero no llevas contigo un conservante para lentejas y las tiendas están cerradas. Lo único que tienes cerca es agua. Pero, ¿puedes simplemente convertir tus lentillas en agua?

Los peligros de guardar las lentes de contacto en agua (Tap)

Las lentes de contacto son una forma estupenda de mejorar tu visión sin tener que llevar gafas. Sin embargo, es importante cuidarlas para evitar posibles peligros. Uno de los mayores peligros es guardar las lentes de contacto en agua del grifo. Aunque pueda parecer una opción práctica, en realidad el agua del grifo puede estar llena de bacterias nocivas y otros microorganismos que pueden causar infecciones oculares graves. De hecho, el agua del grifo no es estéril y puede contener una variedad de contaminantes que pueden dañar tus ojos.

Además, los viajeros corren un mayor riesgo de contraer infecciones oculares debido a la calidad del agua fuera de los países desarrollados. Es importante utilizar siempre soluciones estériles para limpiar y conservar las lentes de contacto, sobre todo cuando se viaja. Esto ayudará a reducir el riesgo de infección y a mantener tus ojos sanos.

Para evitar posibles riesgos, lo mejor es utilizar una solución especialmente diseñada para limpiar y guardar las lentes de contacto. Así te asegurarás de que las lentillas se limpian y desinfectan correctamente, reduciendo el riesgo de infección. Además, es importante lavarse siempre las manos antes de manipular las lentes de contacto para evitar transferir bacterias u otros contaminantes a los ojos.

¿Y si ya has guardado accidentalmente tus lentes de contacto en agua?

¿Alguna vez has guardado accidentalmente tus lentes de contacto en agua? No te preocupes, no eres el único. Es un error común que mucha gente comete. Sin embargo, es importante saber que guardar las lentillas en agua puede provocar infecciones oculares graves. ¿Qué debes hacer si ya has cometido este error? En primer lugar, retira las lentillas del agua y enjuágalas bien con una solución para lentillas. A continuación, desinféctalas con una solución nueva y déjalas en remojo durante al menos seis horas antes de volver a ponértelas. También es importante sustituir las lentillas lo antes posible para evitar cualquier riesgo de infección adicional.

¿Qué debe hacer si ha olvidado la solución para lentillas?

Olvidar el líquido de lentillas puede ser un verdadero problema para tus ojos. Ya estés de vacaciones o simplemente haciendo recados, es importante tener un plan de reserva en caso de que olvides tu solución.
En primer lugar, que no cunda el pánico. Existen varias opciones. Una opción es utilizar solución salina como sustituto temporal. Aunque no limpiará las lentillas tan bien como la solución habitual, te ayudará a aclararlas. Otra opción es utilizar una solución de peróxido de hidrógeno, que puedes encontrar en la mayoría de las farmacias. No obstante, asegúrate de seguir las instrucciones al pie de la letra y deja que la solución se neutralice antes de volver a ponerte las lentillas.

Si no tienes acceso a ninguna de estas opciones, puedes utilizar agua destilada para enjuagar las lentillas. Sin embargo, esto sólo debe hacerse en caso de emergencia, ya que el agua del grifo puede contener bacterias nocivas y otros contaminantes. También es importante tener en cuenta que el uso de cualquier solución que no sea la habitual puede aumentar el riesgo de infecciones oculares y otras complicaciones.

Conclusión

Guardar las lentes de contacto en agua del grifo puede provocar infecciones oculares graves debido a la presencia de bacterias nocivas y otros microorganismos. Es importante utilizar una solución estéril para lentes de contacto y lavarse las manos antes de manipular las lentes para evitar transferir bacterias u otros contaminantes a los ojos. Los viajeros deben tener especial cuidado y utilizar soluciones estériles cuando viajen fuera de países desarrollados. Si las lentes de contacto se guardan accidentalmente en agua, deben retirarse, enjuagarse con solución para lentes de contacto, desinfectarse con solución nueva y dejarse en remojo durante al menos seis horas antes de volver a usarlas.

Olvidar la solución para lentillas puede ser un problema, pero existen otras opciones. La solución salina puede utilizarse como sustituto temporal, mientras que la solución de peróxido de hidrógeno puede encontrarse en la mayoría de las farmacias. Sin embargo, es importante seguir cuidadosamente las instrucciones y dejar que la solución se neutralice antes de volver a ponerse las lentillas. El agua destilada sólo debe utilizarse en caso de emergencia, ya que el agua del grifo puede contener bacterias nocivas y otros contaminantes.

Es aconsejable llevar una solución adicional cuando se viaja y tomar precauciones adicionales para proteger los ojos de posibles peligros. También existen productos de ayuda, como soluciones de viaje y estuches para lentillas. Los viajeros deben ser conscientes del mayor riesgo de infecciones oculares debido a la calidad del agua fuera de los países desarrollados y utilizar soluciones estériles para limpiar y guardar las lentillas. Tomando estas precauciones, las personas pueden disfrutar de una visión nítida sin poner en peligro sus ojos.

Boletin informativo

¡Suscríbase a nuestra actualización periódica con descuentos y consejos y trucos y obtenga un descuento de € 5 en su primer pedido!